Operación de Cataratas

No hay un tiempo «exacto» para la cirugía, pero se recomienda cuando la catarata empieza a afectar la calidad de vida del paciente, dificultando actividades diarias como leer, conducir o ver con claridad. En el pasado, se esperaba a que la catarata estuviera «madura» antes de operar, pero hoy en día, gracias a los avances en tecnología oftalmológica, se puede intervenir en etapas más tempranas para evitar una mayor afectación de la visión.

La cirugía de cataratas es un procedimiento ambulatorio rápido y seguro, que dura aproximadamente 15-20 minutos por ojo. Se realiza con anestesia tópica (gotas) para evitar molestias y consiste en extraer el cristalino opacificado y reemplazarlo por una lente intraocular (LIO). La técnica más utilizada es la facoemulsificación, que emplea ultrasonidos para fragmentar y extraer la catarata a través de una microincisión, permitiendo una recuperación más rápida.

No, la cirugía es indolora, ya que se usa anestesia en gotas para adormecer el ojo. Durante el procedimiento, el paciente puede notar una ligera sensación de presión o ver luces brillantes, pero sin dolor. En el postoperatorio, algunas personas pueden experimentar molestias leves, como sensación de cuerpo extraño o sequedad ocular, que desaparecen en pocos días con el uso de lágrimas artificiales y antiinflamatorios recetados por el oftalmólogo.

Existen varios tipos de lentes intraoculares, y la elección depende de las necesidades visuales del paciente:

• Monofocales: Ofrecen una visión nítida en una única distancia (lejos o cerca). Se recomienda para quienes no les importa seguir usando gafas para ciertas actividades.
• Multifocales: Permiten enfocar a diferentes distancias (cerca, intermedia y lejos), reduciendo la dependencia de gafas.
• Tóricas: Son ideales para pacientes con astigmatismo, ya que corrigen este defecto y proporcionan una visión más clara.

El especialista determinará cuál es la mejor opción según la evaluación previa.

La recuperación es rápida y la mayoría de los pacientes notan una mejoría en su visión en las primeras 24-48 horas. Sin embargo, la visión puede seguir ajustándose durante algunas semanas. Se recomienda evitar esfuerzos físicos intensos, frotarse los ojos o nadar durante el primer mes. En la mayoría de los casos, se pueden retomar actividades diarias normales, como leer o ver televisión, en pocos días, y la conducción suele permitirse después de la primera revisión postoperatoria.

No, una vez que se extrae el cristalino y se reemplaza por una lente intraocular, las cataratas no pueden volver. Sin embargo, en algunos pacientes puede aparecer lo que se conoce como opacificación de la cápsula posterior, una ligera nubosidad detrás de la lente intraocular. Esto se soluciona fácilmente con un tratamiento con láser YAG, un procedimiento rápido e indoloro que restablece la claridad visual.