¿Por qué es tan importante el bienestar digestivo?
El sistema digestivo tiene una longitud de hasta 11 metros, se asemeja a un gran tubo que va desde la boca hasta el ano. El intestino delgado es el responsable de absorber los nutrientes, recogiendo las vitaminas, el colágeno, los aminoácidos, etc, que añadimos a nuestra dieta.
El microbioma del organismo o flora bacteriana equilibrada, es esencial para el buen funcionamiento del sistema digestivo. De esta manera, se evita que los alimentos fermenten en el estómago produciendo gases y teniendo un tránsito intestinal regular.
Si nuestra flora bacteriana no está lo suficientemente crecida y activa, se produce hinchazón de estómago y gases. Esto provoca un fuerte dolor de estómago y problemas digestivos, además de la dificultad para la absorción de nutrientes. Con la falta de la absorción de nutrientes, el bienestar digestivo es inexistente, afectando a todo el organismo y reflejándose exteriormente en la piel.
¿Qué consecuencias se notan en la piel cuando no existe bienestar digestivo?
Teniendo en cuenta que el microbioma afecta a todo el organismo, es normal que también se refleje en la piel. La calidad y la luminosidad de este órgano empeora. Los nutrientes de los alimentos son los encargados de mantener el metabolismo. Estos nutrientes llegan a la piel para la formación de fibras encargadas de sostener la matriz cutánea, como la elastina y el colágeno.
La buena alimentación es importante ya que mantiene las capas internas de la piel. Los tratamientos tópicos como las cremas hidratantes, mantienen las capas más externas. Una piel apagada se produce con un sistema digestivo pesado, como consecuencia de una mala absorción de nutrientes.